Ser profesor online es genial. Relativa libertad de escoger horarios, precios, vacaciones y otros temas. Pero, tiene un defecto: estás vendiendo tu tiempo.
Sí, ya sé que casi nunca lo vemos así. Pensamos que estamos vendiendo un servicio de clases de español o del idioma que sea, pero en la práctica estamos vendiendo nuestro tiempo. Cobramos algunos euros por 1 hora de clase (o el tiempo que decidamos) más el tiempo que tardamos en preparar dicha clase. Es decir, si tardamos, por ejemplo, 30 minutos en preparar una clase de una hora y esa clase la cobramos a 24€, estaremos ganando en realidad 16€ por hora: 16€ (60 minutos) de la clase + 8€ (30 minutos) de la preparación de la clase. Esa es nuestra realidad: en el ejemplo no ganamos 24€ por hora, sino 16.
No es ningún problema si juntando todo el dinero que ganamos con las clases conseguimos el salario que creemos merecer. La complicación viene cuando esto no es así. Quizás no has tenido la precaución de hacer cuentas para ver cuánto tenías que cobrar por clase para llegar a tu objetivo económico o, simplemente, el mercado no te permite poner las clases más caras.
Ahí es cuando el concepto de vender nuestro tiempo adquiere la importancia que merecía desde el principio. Y es que, va a llegar un momento en que va a ser físicamente imposible que obtengas más dinero del que estás ganando. ¿Qué ocurre entonces?
Efectivamente, si las clases son lo tuyo, te sientes feliz en este trabajo, pero no ganas lo suficiente, vas a tener que inventarte alguna forma de ingreso adicional para que tus cuentas cuadren. Lo que te propongo es algunas maneras de ganar ese dinero extra o, quién sabe, de convertir esa nueva venta en tu ingreso principal.
Libros
Quizás pongo la venta de libros como primera opción porque me toca muy de cerca, ya que fue mi primer ingreso extra después de convertirme en profesor online de español. Es cierto que el libro “Cómo convertirte en profesor online de idiomas” no me hace rico, pero al final del mes me da pequeñas alegrías extras. Tienes varias opciones de ebooks o libros de papel que puedes crear:
- Pequeños y sencillos libros de lectura para estudiantes de idiomas. Aunque parezca mentira todavía hay mucho mercado en esto ya que normalmente estos libros son caros y a muchos alumnos no les apetece gastarse más dinero en libros o porque no hay mucha variedad en temas y niveles (dependiendo del idioma, claro). Un ejemplo son los libros del conocido poliglota y profesor de inglés Olly Richards que vende libros de español, alemán e italiano para diferentes niveles y con precios baratos. Puedes pensar que los precios son muy bajos, pero debes darte cuenta que una vez consumido el tiempo que tardaste en confeccionar el libro, después solo tendrás que gastar un poco más en divulgarlo. El resto es esperar a que comiencen a caer los millones. Bueno, quizás he exagerado un poco, pero algún dinerillo puede terminar llegando.
- Libros de gramática. Lo sé, enseñar gramática puede ser aburrido para los alumnos y también para los profesores (dependiendo de cada caso), pero aún así es necesario, como mínimo, una base de gramática. Por tanto existe la posibilidad de crear libros con tablas de verbos, conjuntos de reglas gramaticales para diferentes niveles, cuadernos con ejercicios de diferentes tipos. Es algo que muchos estudiantes agradecen porque lo quieren tener reunido todo en el mismo sitio y de forma clara.
- Libros de vocabulario especializado. Muchas veces veo que un profesor ofrece clases de español para negocios, francés para turismo o inglés para abogados. La realidad es que, excepto en casos muy particulares, enseñar un idioma para un ámbito laboral o propósitos muy concretos, es lo mismo que enseñar el idioma regular, pero con un vocabulario adicional algo diferente de lo normal. En ese caso ¿Por qué no poner en venta ibros de vocabulario por temas u objetivos? Los compradores pueden tus propios estudiantes, los estudiantes autodidactas y también otros profesores que siempre andamos preguntando dónde encontrar vocabulario de tal o cual tema.
Cursos offline
Seguramente hayas hecho ya algún curso offline en Udemy, en alguna universidad o en la página de algún profesional. Quizás haya sido gratuito o quizás de pago. Bueno, pues no hay mucho más que explicar sobre el tema excepto que es algo bastante laborioso, al menos si lo quieres hacer bien. Déjame mencionar dos cursos muy diferentes de dos profes de español, ambos son buenos ejemplos de lo que se puede hacer en este ámbito:
- El curso de fonética y fonología del español creado por Javier Alvarez.
- El popular curso Enseñando español online de Beatriz Mora.
Por supuesto hay muchos temas por los que te puedes decantar a la hora de crear un nuevo curso, no pienses que por ya existir uno igual no puedas vender tú uno alternativo. Dependerá del público objetivo que pueda comprar tu producto. Deberás hacer un poco de estudio de mercado para ver si tu idea vale la pena. Pero por si acaso no se te ocurre nada, déjame ofrecerte algunas ideas a través de un amigo. Ingo Depner es un profesor de alemán que tiene varios cursos en Udemy sobre diferentes temáticas, así que puedes adquirir varias ideas para generar tus propios cursos. He dicho adquirir ideas, ¡no copiarlas al pie de la letra! ;).
Venta de materiales
La venta de materiales ha sido, tradicionalmente, una de las formas más típicas de conseguir ese salario extra (o incluso el principal) que buscamos. Quizás a ti sea una parte de dar clase que te encanté: crear materiales y actividades para tus alumnos, pero debes pensar que muchos profes, simple y llanamente, lo odian. Por eso, prefieren gastar unos pocos euros en materiales que pueden rentabilizar rápidamente sin gastar un minuto de tiempo. Además, cuando consigues que un profe te comience a comprar materiales es posible que le tengas como cliente por mucho tiempo.
La ventaja adicional de este producto es que lo puede ir creando al mismo tiempo que preparas tus clases. Algún día hablaré de ello en concreto, pero el asunto consiste en que cada vez que prepares un material nuevo lo hagas pensando en venderlo a otros profes o estudiantes haciendo ligeros cambios de diseño, por ejemplo. De repente, ese tiempo que gastas en preparar tus clases, se habrá vuelto más productivo.
Un buen ejemplo para que veas lo que se puede hacer en este sentido es Jorge Sivit, a quien conocerás si viste la serie de vídeos de Experiencia. Puedes ver su tienda online aquí.
Si no sabes dónde vender esos materiales (aunque hay muchos sitios y maneras), ten un poco de paciencia y podrás hacerlo en Didaski.com cuando dicha sección esté preparada ;).
Zona Premium
Otra opción en alza entre algunos profesores es la de crear una zona premium para sus alumnos o para estudiantes autodidactas. Puedes crear material exclusivo o adaptado para esta zona, con explicaciones, vídeos, actividades, etc. ¿También quieres un ejemplo de este tipo de ingresos alternativos? Sin problemas, Elena Prieto tiene una estupenda página con dicha opción. Quizás te interese incluso recomendársela a tus propios alumnos. De esta forma, te evitas tener que crear actividades o debres extras para fuera de la clase ;).
Consultoría
Esta es una opción que aún tiene mucho potencial pese a que grandes compañías ya llevan practicándola muchos años. Por tanto, no tiene nada de nueva. Se trata de ofrecer un servicio, generalmente a empresas, donde le haces una revisión del estado de sus empleados y de la empresa en general respecto a cierto idioma. En función del resultado, deberás informar de las mejoras que deben introducir, los cursos que pueden adquirir, los profesores que deben contratar, mejoras en traducciones o cualquier otro dato que consideres importante. Es un sector difícil ya que, como decía, hay grandes consultoras que se dedican a hacer ese tipo de trabajo en muchos niveles. Pero, no es motivo para no comenzar a ofrecer tus servicios a pequeñas empresas y ver cómo te va.
En mi caso, también ofrezco un servicio de consultoría para aquellos profesores que quieren intentar ganarse la vida dando clases online, pero no saben ni por donde comenzar. Un servicio más dirigido a la idea de emprender un negocio y todo lo que ello conlleva que al enfoque de la metodología. Sin embargo, por falta de tiempo, es un servicio de pago que hago exclusivamente con aquellos que me han venido directamente a preguntar por él. Quizás algún día de estos lo haga público, ¿Quién sabe?
Enlaces de afiliados
Una última forma de ganarse unos céntimos extras es con los enlaces de afiliados, es decir, ofreciendo productos de otros profesionales de los que tú puedas sacarte una comisión al recomendarlos. No es un negocio muy lucrativo excepto que vendas buenos productos a buenos precios. Si te fijas, lo tengo que confesar ;), algunos de los enlaces que he puesto en este artículo son enlaces de afiliados. Aunque hay pocas posibilidades de que vayas a comprar uno de esos productos (de hecho los he puesto a modo de ejemplo, no para venderlos), si alguien decide gastarse unas monedas, yo me llevaré un precioso (y normalmente no muy alto) porcentaje de dichas ventas.
Eso sí, sé consecuente con tu forma de pensar y con tu ética. Mi trabajo a lo largo de un par de años en Un Idioma Cada Vez me ha abierto las puertas a poder recomendar varios productos por los que puedo ganarme algún porcentaje. Sin embargo, la mayoría de las veces he rechazado esa posibilidad porque no me gustaba lo que ofrecían o simplemente porque no tenía la oportunidad de comprar su calidad. No me parece justo ni elegante recomendar algo que no conozco o en lo que no creo. Por eso, por salud mental y por sentirte bien contigo mismo, te recomiendo que si se te ha ocurrido divulgar algún producto de otra persona lo hagas porque te parece un buen producto y no solo porque vas a ganar dinero fácil y sin esfuerzo.
Hay vida más allá de las clases
Como ves, hay muchas otras formas de ganarse la vida como profesor o con el conocimiento que te da esta profesión. Hay muchas más maneras que las que te he mencionado, pero para comenzar a pensar en el tema, creo que no está mal. Eso si, no esperes hasta el último momento para crear tus propios productos. Como te decía al principio, muchos profes comienzan a pensar en estas posibilidades solo cuando ven que no tienen más tiempo para dar clases, pero el dinero que ganan es menos de lo que les gustaría. No esperes tanto, cuanto antes comiences a, como mínimo, pensar en tus ingresos alternativos, mucho mejor.